A escasas horas del posible final de este largo recorrido de curvas en constante verticalidad, imagino las frases ajenas de una sinfonía de voces. Pero no sé qué pasos exactamente me guiarán a la próxima espiral que está por llegar. Tan sólo sé que llegará.
Tanto tiempo pensando en el final, que ahora cuando se presenta, no sé cómo reaccionar. Quizá lo único que soy capaz de imaginar sea esa sensación de alivio, de peso quitado de encima. Sólo unas horas más.
Esta espiral se ha curvado demasiado, durante demasiado tiempo, y ya es hora de salir de ella, dejarla atrás y comenzar algo nuevo. Te he disfrutado y odiado durante casi siete años, y ya va siendo hora de decirte adios.
domingo, junio 20, 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario